Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de 2013

Latidos

Escribo como si me estuvieran persiguiendo; es el tiempo, es el tiempo. *** Cállate; escucha. Tras el silencio hay una palabra concedida. Escucha siempre. *** Fue un sueño increíble, Vivía libre Era feliz Nadie le creyó que fuera posible. Dejó de soñar.  ***

Arte en la belleza

Para hacer belleza se necesita una técnica usada mil veces hasta lograr dominarla, abombada la imaginación y abonada con sentimientos ininteligibles, los poetas flamean sus palabras hasta encontrar el verbo exacto, los pintores degradan hasta el límite los colores. A comienzo s de la vida (las cuevas de Altamira) se apreciaba en el arte la pureza y la perfección. Hoy día la contemplación más detallada a una belleza que, no se conforma con ser bella. El arte actual quiere ser social, político, usual. Etc. El pensamiento y la técnica exacta (estilo del artista) son su instrumento de arte, desde el punto de vista creador. La belleza es bella cuando está cargada de emociones sinceras, de resto es pura imitación de lo real. La fantasía es el arte sagrado. La realidad imita a la fantasía: no existe el arte real, es la realidad que se vuelve fantástica con sus acciones incongruentes. El uso del arte es totalmente histórico, aunque actualmente se aparte de lo estético, sigue siendo bello. Su

Artículo con pretensión de ensayo: sobre recomendar libros

“recuerda que tras de cada libro hay un ser humano que quiere decirte algo” Cesar Pavese.     El mensaje de un libro es una puerta cerrada, uno decide abrirla, entrar o resistirse. Cada vez que se lee esa puerta va instituyéndose en tamaño, forma y sentido. Esa puerta a medida que es pensada, analizada y contextualizada va tomando sentido y nos expone en el mundo. Después de cada lectura uno puede amar u odiar al mundo; puede servirle al mundo o servirse de él. El libro es un objeto escrito por un sujeto que manifiesta su visión del mundo, desde la trinchera que lo ve y cómo lo cree. No es la verdad lo que está escrito en esas páginas que una vez fueron blancas e inocentes, porque ya escritas, son balazos líricos con un serio propósito, al igual que este escrito. El libro por sí sólo no transforma, no hace nada, puede más bien deformarse en las lenguas malintencionadas que, valiéndose del mensaje, se imponen a  los seres humanos para su aprovechamiento material y simbólic